sábado, 16 de enero de 2010

Vale por el sueño de una noche de verano. Vale por la primera lágrima de una carcajada desternillante. Vale por un: eres todo y más. Vale por una lámpara de luz taciturna. Vale por un te quiero susurrado al oído. Vale por una de esas tardes en las que no quieres hacer nada. Vale por una compañía perfecta. Vale por una dosis severa de azúcar. Vale por un trocito de Sol ardiente. Vale por sabor del primer beso. Vale por la emoción al escuchar tu canción favorita. Vale por un solo día siendo tú. Solo canjeable en tiendas especializadas, no se admiten devoluciones ni cambios imprevistos. De regalo una sonrisa, tres globos y un siempre jamás.

1 comentario: